martes, agosto 12, 2008

El sistema sanitario público.

Bueno, de nuevo tengo que acudir al hospital a que me quiten un pequeño quiste de la cara, y como siempre te hacen dar miles de millones de vueltas, pasándose la pelota unos a otros.

Cuando por fin el medico de cabecera se convence que eso hay que quitarlo, porque me ha costado lo mio y al final tuvo que darse cuenta que con antibióticos eso no desaparecía de mi cara (no quiero llamar incompetente al doctor, pero creo que un poco despreocupado si, aunque es comprensible, pues debe ser abrumadora la cantidad de pacientes que pasan al día por la consulta), pues me da un volante para que me vean en un centro de Madrid, Pontones, un cirujano. Cuando llego a la consulta del cirujano este me dice que ellos son un poco brutos para hacer ese trabajo y mejor me envía a un cirujano plástico. Por mi perfecto y mejor, pero eso también podría haberlo pensado el doctor anterior, creo yo y así evitar un paso y papeleo. Pues bien una vez dicho esto el cirujano me hace un volante para el plástico, pero primero he de pedir cita. Bajo un par de pisos y cojo un número para esperar a que me den cita. Curioso es que ni siquiera tienen un contador, que los números se dicen de boca y es la propia gente la que tiene que ir recordando y percatándose del número por el que se va.

Bueno, pues me toca el turno, la amable señora me da cita para un día en concreto y una hora en concreto para el cirujano plástico. Perfecto, ahora solo queda esperar.
Llegado el día acudo puntual a mi cita con el cirujano plástico y cuando consigo encontrar la consulta, me entero que el papel que tengo no sirve y he de pedir número para poder entrar en la consulta. Me dirijo a una habitación donde una chica mira mi papel y me da hora, que nada tiene que ver con la me dieron previamente, para poder entrar a examen del cirujano. Después de una hora y media de espera entro y me hace una serie de preguntas , las cuales imagino será rutinarias para estos casos, ademas me dice que me quedará una cicatriz de unos 2 centímetros ¿?¿?¿?¿? ¡¡¡pero si el cirujano me ha mandado aquí por eso precisamente!!! y al final me da cita para análisis y anestesista al cabo de una semana mas o menos. Para los análisis no he de pedir cita, pero para el anestesista tengo que bajar unos pisos entrar en una consulta, donde una persona me da un papel con la fecha y hora a la que debo estar en la consulta.

Llega el día de los análisis, subo a la zona y claro con la hoja que tengo me dan unas pegatinas y un número para esperar mi turno. Después de un ato largo, pues es agosto, la gente está de vacaciones, los enfermos no al parecer, me toca y bajo a ver al anestesista, mas tarde de mi hora marcada.
Cuando estoy en la consulta del anestesista me dicen que debo pasar por la consulta para que me den turno de entrada, de nuevo vuelvo donde una semana antes me habían dado hora para el anestesista a que me den turno de entrada, le doy el papel a la chica y esta me dice que espere enfrente de la puerta a que me llamen. A los pocos segundo aparece esta chica que lleva el papel que yo le di, se lo da al anestesista y este me llama. Me realiza las mismas preguntas que la cirujana plástica (si es correcto escribirlo así) , ni siquiera me pesa y se fía de los datos que le doy. No han pasado 5 minutos y estoy fuera con la noticia de que unas 3 semanas mas o menos será la operación.

En fin todo esto para que me quiten un quiste en unos 15 minutos un día que está por llegar.
Supongo que las personas que han diseñado este sistema serán muy capaces, tendrán unos sueldos de la ostia y será muy listos, pero a mi forma de verlo es una manera de hacer papeles y perder tiempo innecesaria. Porque he de pedir cita cuando ya tengo cita, porque he de pasar por tantas consultas en las que repiten las mismas preguntas una y otra vez.

Estoy seguro que esto se puede hacer en un tiempo menor, si me das cita para el día 27 a las 11:30 pues ya está para que tener que coger otro numero y esperar voy a la consulta y me atiendes y después a otro sitio.

Bueno, pues solo es una pequeña critica a esto que parece que dicen que es tan bueno y creo que realmente no funciona tan bien, por lo menos queda esperar que la persona que opera sea muy profesional y la espera y los mareos merezcan la pena.

lunes, agosto 11, 2008

Mas mierda de la misma

Como es posible que siempre se produzca la misma sensación cuando veo algo que deseo. Es como una especie de frustración interior, la cual me hace sentir desgraciado por no poder obtener aquello que deseo, aquello material y que no puedo obtener por no tener el dinero necesario para su adquisición.

Supongo que este sentimiento es común a la mayoría de las personas de andar por calle. Pero como cada uno somos individuales, pues yo lo siento para mi.


Escucho en la radio que, ahora que estamos en crisis, muchas empresas gordas se van a la mierda, y claro eso arrastra a los miles de trabajadores que de ellas, directa o indirectamente dependen. No obstante aquellas personas que está al frente de las empresas, con las que se han hecho ricas, apenas les afecta, pues si de acuerdo que pierden un montón de cosas por ellos, pero al fin y al cabo no tendrán problemas para llegar a fin de mes. Tendrán que bajar un poco su ritmo de vida y ya está, a lo mejor eso les hace no poder disfrutar de su yate todo lo que les gustaría, pero eso al fin y al cabo tampoco es un sufrimiento muy grande, vamos digo yo.


Eso me hace pensar el agujero en el que estoy inmerso. Intento pensar en el día en que me compre una casa y vea esa cantidad de ceros escrita en un papel que estoy a punto de firmar, por el cual me esclavizo una tira de años muy importante en la vida de una persona, dedicando a ello un porcentaje elevado del sueldo que gano mes a mes. Para que luego digan que la esclavitud fue abolida, lo que pasa es la cambiaron de nombre, la escondieron detrás de la burocracia, hipotecas y demás historias.


Me da pena todo eso, tener que estar pendiente de pagar, de trabajar, de ganar lo suficiente para intentar llevar una vida lo mas realizada posible y luego ves lo que te rodea y dan ganas de irse del planeta.

El estado recomienda, en épocas de calor, evitar los esfuerzos en horas de máximo calor, pero na hace nada por los miles de trabajadores que se tienen que partir la espalda día a día bajo el sol en las obras u otros puestos para pagar sus gastos.

Dicen que tenemos que ahorrar electricidad evitando dejar los aparatos en stand by, pero a nadie le preocupan la cantidad de edificios de oficinas que por las noches, aun vacíos, permanecen con la mayor parte de sus luces encendidas, eso no es despilfarro, claro que no.


Permiten que nos estafen las empresas de comunicación vendiéndonos algo que no es real, que lo que se obtiene no es lo que te anuncian, permiten que nos cobren dinero por presuntos delitos que vamos a cometer con la tecnología. Permiten una especulación brutal para así ver aumentadas las ganancias por unos cuantos metros cuadrados donde vivir, pero al fin y al cabo da igual, porque los políticos y todas las personas que dirigen el cotarro tienen tanto dinero que no les afecta nada de sus decisiones.

En fin que vivimos en un mundo de mierda y para colmo de males entre nosotros nos matamos, no nos respetamos, intentamos pisar al que tenemos cerca, le intentamos sacar hasta el último céntimo que nos sea posible, aquí que se den por aludidos esos caseros que les sale el dinero por las orejas cuando piensan en los alquileres que cobran a sus inquilinos, estafamos a los mas débiles, no drogamos con lo que podemos para así olvidar lo que nos pasa durante la semana, para evadir los problemas durante un tiempo. Nos empapamos de fútbol para evitar ver lo que realmente es importante.

Después seguimos cometiendo los mismo errores, porque al fin y al cabo nos cuesta tanto probar cosas nuevas que siempre nos quedamos en el misma mierda, porque otras mierdas a lo mejor no olerían tan mal, pero para eso existen complots secretos y así evitar que cambiemos.

Al final siempre es lo mismo, pero es que todo esto es una mierda.